viernes, 30 de diciembre de 2005

Mi padre y su cuento fantástico de fin de año

Mi viejo aprovechó que me vió de buen humor (y ocupado comiendo) y me relató algo que le sucedió.

Ayer mis progenitores salieron de la oficina con sendos portafolios y muchas bolsas (excedente de pan dulce, sanguchitos, etc, etc), mi viejo en un acto de caballerosidad digno de la vieja guardia, se ofreció a llevarle el portafolio a mi vieja, bien, subte estación tribunales, se sientan a esperar el subte, llega subte, mi viejo manotea el portafolio (repito: EL portafolio) y suben al subte (o subten al sube).
Ni bien se cierran las puertas mi padre dice: ¿Uyyyy y tu portafolio?.
Mi madre ya resignada a que estaba perdido le dijo que recién en pueyrredon se puede volver.
Mi viejo se abrió camino entre el ganado, se bajó en callao, salió, cruzó la calle que parecia estar esperándolo para que cruce (en realidad, corríjanme si me equivoco, hay una forma de tomar el subte de regreso sin salir a la calle) entró al subte, y la formación estaba estemmm formada esperando a que él suba, la bendita tarjetita no quería funcionar, luego si, llegó a entrar justo cuando cerraban las puertas.
Al llegar el vagón a la estación ahi estaba el maletín en el mismo lugar, sentada al lado del objeto había una señora con un guardapolvo azul.
Mi viejo se aproximó agradeciendo a los santos evangelios, la señora solo se limito a decir que hacia rato que ella estaba sentada ahi y que nadie tocó nada.
Mi padre le dió dinero en muestra de agradecimiento, le deseó felices fiestas y subió al subte, la mujer quedó sentada allí.

Mi padre cree que la mujer en realidad no existe, que es un ser fantástico, como un ángel de la guarda, y que por eso éste es un relato fantástico.

Concuerdo, pero lo que para mí fue lo mas fantástico, fue el hecho que mi viejo usara el celular para llamar a casa... el hombre se resiste al aparatito, asi que cuando atendí el teléfono y escuché su voz una lágrima de emoción me acarició la mejilla, no le entendí un pomo de lo que me estaba hablando, pero me emocioné.

Como éste probablemente sea el último post del año, FELIZ AÑO NUEVO!!!

5 comentarios:

Johann Tenorio dijo...

Y pensar que hay quienes piensan que los ángeles no existen...
Marcelo, haberte conocido fue una de las cosas más importantes que me sucedieron este año, y no exagero. Espero que vos también empieces un año glorioso, de esos en que, si bien no se cumplen TODOS tus deseos, al menos te acercan bastante.
Un abrazo,
Johann

Sebastian dijo...

Qué puedo agregar? Que los ángeles nos sigan protegiendo y que sigamos en el camino de la vida, que es de ida. No te podés bajar de la vida en Callo y pegar la vuelta para buscar lo que te olvidaste, así que andá a buscarlo de una que vale la pena correr el riesgo. El 2006 ya empezó así que desde las pampas canadienses les deseamos un feliz año, Sebastián, Cucho Tenor y Flavio Pedemonti.

Anónimo dijo...

Esto es inconcebible! No puede ser que haya gente con historias menos creíbles que las mías! Desde ya tu querido pa queda invitado a actuar en mi blog jeje y aunque tarde FELIZ AÑOOO!

Anónimo dijo...

Cellito... deja de fumar cosas raras.... y encima... le das a tu viejo... Lo parió.
Anónimamente Anónima

Martín dijo...

Hola! Estaba así como visitando blogs de desconocidos y caí en el tuyo, todavía no sé cómo, pero acá estoy.. el cuento de tu viejo, verdad? ficción? construcción de una realidad paralela? invento para excuzarse y estar ausente un momento? quién sabe.. pero es creíble.. Decile que escriba cuentos de suspenso, que le va ésa onda..
Ché, quién puso todas ésas direcciónes ahí arriba? tuve que bajar como media hora con el mouse para dejarte mi opinión..