viernes, 21 de mayo de 2004

Sobre el humor de quirófano

Encontrándonos a última hora del martes esperando los resultados de una operación que se hizo mi viejo, y ya un tanto ansiosos, nos aproximamos al centro de enfermería, dos sujetos anuncian a las enfermeras que van a la habitación de mi progenitor, la enfermera con cara de persona divertida les pregunta ¿Son parientes? a lo cual uno de ellos responde "si, un poco", mi madre, en un estado intermedio de agotamiento, temor, furia, incredulidad, shock, y valentía dijo: "¿Quienes son esos dos viejos que quieren ir a la habitación de mi esposo? Ellos no son parientes, ¿es que no hay seguridad en esta clínica??
A lo cual la enfermera respondió con tono "divertido" -nooooooo, es que es el cirujano que siempre hace ese chiste.

Mi vieja luego de identificarse ante el bromista del escalpelo, y próxima a increparle duramente a ese sujeto despreciable por "la ocurrencia" recibió la noticia de que la operación había sido un éxito, y que todo había salido según lo planeado.

Agradecimos al ocurrente, simpático y excelente profesional, y luego de hacerle una breve visita a mi viejo pudimos ya retirarnos con la firme convicción de que estaba en excelentes manos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

la verdad que si, la sinceridad es lo primero